Salvar el planeta
comienza en casa

La búsqueda de un consumo ético se ha convertido en parte del estilo de vida, imagen y autocuidado de muchas personas. A la optimización del cuerpo y la mente, le sigue la necesidad de comprender y mejorar el impacto del comportamiento individual no solo en la salud, sino también en el medioambiente.

Para mejorar la huella de carbono personal, cada vez más empresas ofrecen aplicaciones y otras herramientas para el seguimiento del impacto, tanto en el mundo analógico como en el digital. 

La grave explotación del planeta ha provocado una crisis de consumismo y ha inquietado a los consumidores. Muchos se preguntan cómo pueden comprar, viajar y consumir con la conciencia tranquila ante la crisis climática actual. 

La tendencia hacia un modo de vida ético es evidente. No obstante, en muchas ocasiones, asumimos el discurso, pero no los actos

Mikel Feijoo, Director en SKFK

Habitantes alemanes ahorrarían energía y se muestran muy dispuestos a cambiar su comportamiento personal por razones de protección climática, según una encuesta de Statista de 2020.

Encuestados alemanes estarían dispuestos a viajar con menos frecuencia en avión. El 74% compraría a nivel regional y el 65% reduciría el consumo de carne, según Statista.

Encuestados australianos que participaron en un estudio de Ipsos afirmaron que cambiaron sus hábitos de reciclaje debido a preocupaciones por el cambio climático.

Encuestados en India informan haber realizado cambios en su vida para contrarrestar el cambio climático, según el último Global Ipsos’ survey para el Foro Económico Mundial.

Higiene sostenible

Los consumidores que deseen causar el menor daño posible deben lidiar con un flujo de información que consume mucho tiempo y que se produce en contextos y causas a veces contradictorios. La presión por consumir “correctamente” crece a medida que aumenta la cantidad de información.

En este sentido, los fabricantes se están moviendo para ofrecer a los usuarios posibilidades para integrar la sostenibilidad en su día a día a través de pequeños gestos.

Spotlights

  • El etiquetado de fecha de los alimentos es responsable del 10% de toda la comida que se desperdicia en la UE, casi 9 millones de toneladas anuales, según la Comisión Europea.
  • Algunas marcas quieren demostrar lo fácil que es tomar decisiones respetuosas con el clima cuando los productos están claramente etiquetados con sus respectivas huellas de carbono.

  • Para los consumidores, la única forma de recuperar la credibilidad en las marcas - en cuanto a sostenibilidad - es centrarse en problemas concretos y no hacer promesas vacías.

  • Aumenta la presión sobre las grandes corporaciones para que desarrollen y comuniquen estrategias de RSC en profundidad. La transparencia y la especialización son claves.

Descárgate el informe y descubre la tendencia completa

Hacia un consumo ético y cuantificado.